sábado, 24 de enero de 2009

Cuando algo quiere salir mal...

Salen peor... Hoy si no fuera porque el 90 por ciento de las cosas ha salido bien, ese 10 por ciento sería muy molesto. Sobre todo, que el día de un cumpleaños que tu organizaste, la tienda donde mandaste a hacer la torta te dejó sin torta por la ineptitud de sus trabajadores.

Mejor explico a detalle. El miércoles recién pasado fui al Coppelia que está en el Florida Center a pedir una torta para el día de hoy. Después de un rato de averiguar condiciones, encargué una torta cheesecake frutos del bosque. "Quiere dejarla pagada?", obvio que sí. La pagué y luego me llamó la atención que no tomaran mi pedido, no me pidieron ni el nombreni un fono de contacto. Pregunté si los necesitaban. "No", me dijo la cajera, "con la boleta retira el sábado", parecía apestada de mi presencia y lo único que quería era que me fuera.

Bien. Guardé la boleta, me fui y esperé hasta hoy al medio día, fecha en que repetí que pasaría a buscar la torta. "Disculpe, la verdad lo siento mucho", me dice hoy la jefa del local, "no tenemos ningún pedido para hoy de cheesecake frutos del bosque". Perdón? O sea, para qué la dejé pagada el miércoles, para que insisto en si necesitaban mi nombre etc., si al final la huevona que me atendió, lo único que quería era agarrarme para el hueveo, como si dinero valiera poco.

"Yo le pregunté a esta cajerita si necesitaba mi nombre y fono", dije muy, muy molesta. "Me dijo que no, me dijo que no era necesario y sólo necesitaba la boleta el día que pasara a buscarla. Me quedé sin torta, el cumpleaños es hoy."

Ya en ese momento, todo lo que deseaba era que me devolvieran el dinero y largarme de ahí y no volver más. Realmente, he ido a muchos lugares en Chile, pero ninguno con gente tan imbécil e inepta que literalmente te diga que no es necesario tomar el pedido de una torta que estoy "encargando". Pero eso debe ser cosa del jefe de local que estaba ese día, otro inepto más que se la pasó hablando por teléfono.

Resultado final de todo esto... No tengo la torta y tuve que comprar una hecha en el supermercado a última hora y después de haber pasado un pésimo rato, de haber perdido mi tiempo y haber dejado cosas sin hacer. En este país les fascina eso, que la gente esté a merced del tiempo de otros como si tuvieramos nuestros días libres y todas las horas fueran para que otros las usen a su antojo.

2 comentarios:

Lanzarote dijo...

En España, Te quedarían unas 654.789 ocasiones más para enfadarte por algo similar, dicen que se lleva en los genes, así que relájate y disfruta
Saludos

Kitsune dijo...

LOL, eso explica muchas cosas de este país